Durante el último año, los gobiernos locales del Big Bend han adoptado normas más estrictas sobre la iluminación exterior, como parte de un esfuerzo más amplio por proteger los famosos cielos nocturnos de la región. | Read this story in English
Por Travis Bubenik, traducido por Maria Arce
Una enorme franja del lejano oeste de Texas ha sido designada formalmente como "reserva de cielo oscuro", un reconocimiento al largo trabajo de astrónomos, conservacionistas y comunidades locales para proteger los cielos nocturnos de la región de la contaminación lumínica.
La Reserva Internacional del Cielo Oscuro del Big Bend fue certificada este jueves por la Asociación Internacional del Cielo Oscuro, una organización sin ánimo de lucro con sede en Arizona que supervisa estos esfuerzos en todo el mundo.
"Astrónomos, entusiastas del cielo oscuro y residentes locales son conscientes de lo magníficos y prístinos que son los cielos de esta región", dijo Teznie Pugh, Superintendente del Observatorio McDonald de la Universidad de Texas en Austin. "Esta designación nos permite compartir con el mundo lo que ya sabemos".
El observatorio y otras entidades como Nature Conservancy habían presionado durante más de un año para la creación de la reserva, argumentando que la designación protegería las investigaciones de los astrónomos al tiempo que apoyaría el turismo en la zona.
Aunque la designación en sí misma es más bien simbólica -el grupo que aprobó la reserva no tiene ningún tipo de poder regulador- los pasos que se dieron en primer lugar para que la región del Big Bend fuera designada como reserva podrían tener un impacto tangible en la preservación del cielo oscuro.
En particular, las directrices para la designación de la reserva pedían a los gobiernos locales de la región del Big Bend que adoptaran normas más estrictas sobre la iluminación exterior.
En el último año, los consejos municipales y los comisionados de los condados aprobaron actualizar sus ordenanzas de iluminación, a menudo a instancias del personal del Observatorio McDonald, como Bill Wren, un veterano defensor del cielo oscuro que se retiró del observatorio en febrero pasado.
Según el observatorio, cuatro condados y cinco municipios dentro de los límites de la nueva reserva actualizaron sus normas existentes con "el lenguaje pertinente para garantizar que su iluminación refleje las mejores prácticas".
"Ha sido un verdadero esfuerzo comunitario, y los habitantes de la zona deberían estar orgullosos de lo que hemos conseguido todos juntos", dijo Pugh.
Los límites de la reserva de cielo oscuro se extienden por los condados de Jeff Davis, Brewster y Presidio y llegan hasta partes del norte de México. El Observatorio McDonald y la Reserva de las Montañas Davis de Nature Conservancy conforman una zona "central" de la reserva con las normas más estrictas de iluminación exterior. Dentro de los límites de la reserva se encuentran varios parques públicos populares, como el Parque Nacional de Big Bend, el Parque Estatal de Big Bend Ranch y el Área de Gestión de Vida Silvestre de Black Gap.
Ashley Wilson, una conservacionista que analiza las propuestas de reservas para la Asociación Internacional de Cielo Oscuro, describió la nueva reserva de Big Bend como histórica.
"Se trata del mayor lugar protegido de cielo oscuro del mundo", dijo en una entrevista.
Wilson afirmó que los esfuerzos realizados durante años por la región del Big Bend para evitar la contaminación lumínica le resultaron muy llamativos al analizar la solicitud de la nueva reserva.
Normalmente, dijo, su organización trabaja con comunidades en las que la idea de los cielos oscuros como recurso es relativamente nueva.
"Pero aquí, especialmente con el Observatorio McDonald como uno de los socios principales, llevan décadas dirigiendo los esfuerzos", dijo. "Se está construyendo en lugar de empezar de cero".
Aunque la designación de la reserva allana el camino para continuar con los esfuerzos de preservación del cielo oscuro -como la reconversión de antiguas instalaciones de iluminación con opciones más "respetuosas con el cielo oscuro"- queda abierta la cuestión de si los gobiernos locales de la región tratarán de hacer cumplir realmente las normas actualizadas de iluminación.
Muchas comunidades tienen dificultades para llevar a cabo ese seguimiento, reconoció Wilson.
"Consiguen la certificación, la obtienen a través de sus municipios, pero la mayoría de las comunidades sólo tienen tal vez un equipo, quizás un pequeño equipo de ejecutores", dijo. "Así que ahora tienes un equipo muy limitado de personas tratando de educar y hablar con toda una comunidad".
En un comunicado, el Parque Nacional de Big Bend elogió la noticia de la creación de la reserva.
"La gente que conoce y ama el Parque Nacional de Big Bend debería estar encantada y orgullosa de esta designación", dijo Bob Krumenaker, superintendente del parque.